Delegación Chile - Perú

Las mies es mucha, los obreros son pocos…

 

Con motivo de la preparación a Profesión Perpetua de la Hna. Carmen Domínguez Soto, celebrada el 15 de agosto 2010, hemos compartido con la comunidad de la Parroquia San Gregorio Magno, Mangomarca – Lima, un Triduo Vocacional, con este programa:

 

Domingo 1 de agosto: Jornada Vocacional con todos los grupos parroquiales.

Domingo 8 de Agosto: Jornada Vocacional con jóvenes, en nuestra comunidad, con el tema: Vasijas de barro.

Jueves 12 de agosto: Adoración Eucarística con la participación de toda la comunidad parroquial.

 

Estas actividades nos han permitido vivir este tiempo de preparación con alegría, redescubriendo la vocación, humana, cristiana y especifica. Fue muy importante y valioso redescubrir con la comunidad el valor y el compromiso de la vocación cristiana recibida en el Bautismo. Hemos descubierto la riqueza de las diversas vocaciones en la Iglesia, valorando el lugar y el aporte de cada una.

 

Damos gracias a Dios por la riqueza de nuestra vocación, el carisma pastoral, por habernos llamado a ser Pastorcitas, en medio de su pueblo, caminando con el pueblo.

 

 

 

 

 

 

Otras oportunidades se abren para la Pastoral Vocacional:

 

* Jornadas Vocacionales con jóvenes en Parroquias donde no estamos presentes, pero sí hemos tomado contacto con los párrocos que han conocido nuestro trabajo pastoral en alguna oportunidad.

 

* Encuentro de Pastoral Juvenil Nacional, realizado en Tacna, al sur del Perú, donde se realizó una expo-vocacional; como Familia Paulina participamos con un stand vocacional, a cargo de la Hna. Milagros Rojas Sánchez (Pastorcita), la Hna. Jessica Mostacero (Hija de San Pablo) y el Hno. Francisco Magaña (Sociedad de San Pablo).

 

 

 

 

 

El Padre Alberione dice:

El Señor es el autor de cada vocación; es su divina voluntad la que asigna a las almas el camino para alcanzar el cielo; es él quien llama, aunque sea con medios múltiples y diversos; es él quien prepara las gracias correspondientes; es él, el dueño del campo y de la mies, quien invita a los trabajadores a la siega.

 

¡Cristianizar al pueblo! Ordinariamente las vocaciones vienen de las familias y de las parroquias donde es profundo el espíritu de fe y de piedad; donde las costumbres son sanas y el número de niños es elevado. Tal “es la obra de las obras”, según el Papa Pío X.

(P. Alberione a los sacerdotes, p. 177)

 

Continuemos nuestro empeño vocacional orando y trabajando por las vocaciones.

 

Hna. Aurelia Casimiro sjbp