Delegación Colombia - Venezuela - México

Ejercicios Espirituales 2008

 

Durante el mes de Julio 2008, en ocasión de la Visita Canónica a la Delegación, tuvimos la gracia todas las Hermanas y las Novicias, de vivir una profunda experiencia de encuentro con Dios a través de los Ejercicios Espirituales en Bogotá, guiados por Hna. Marta Finotelli,  Superiora General, que fueron realizados en dos grupos.

 

 

 

Estos días han sido para cada una un tiempo en el que, a través de la profundización de la Palabra de Dios y con el método de la oración de discernimiento, hemos ahondado en el amor de Dios Trinidad, por la humanidad y por cada una de nosotras.

 

Los Ejercicios fueron introducidos con el texto de Is. 55, como una invitación a disponer nuestra vida para el encuentro con el Señor, y a preparar el terreno para que la Palabra de Dios sembrada en nuestros corazones produjera sus frutos.

 

Iniciamos esta experiencia de encuentro con el Señor, haciendo memoria de nuestro Bautismo, recordando que a cada una Dios nos ha llamado por nuestro nombre y ha derramado su gracia en nuestra vida, con los diferentes signos que se usan en el rito del sacramento.

 

En este camino, a través de distintos pasajes bíblicos, fuimos recorriendo la historia de Dios con la humanidad, que es historia de salvación, y es también la historia que Dios está haciendo personalmente con cada una de nosotras.

 

Cada jornada se concluyó con una instrucción espiritual, en la cual Hna. Marta nos orientó y dio algunos elementos que nos ayudan a favorecer el crecimiento en nuestra vida espiritual y en la lucha contra el mal, que está continuamente al acecho para hacernos desistir del amor y la entrega a Dios y a nuestros hermanos.

 

Hna. Marta nos invitó a continuar viviendo este tiempo de gracia en nuestra vida cotidiana y a permanecer con el mandato de nuestro Fundador el Beato Santiago Alberione: “Miren siempre a Jesús Buen Pastor y vivan según Él”.  También a llevar el distintivo de la Congregación como un programa de vida, recordando que estamos llamadas a imitar al Buen Pastor que da la vida por sus ovejas.

 

Agradecemos a Dios, que nos ha regalado este tiempo de gracias, a Hna. Marta por su acompañamiento, y a todas las Hermanas de la Congregación, que nos han acompañado particularmente durante este mes con su oración.

 

Hna. Rosa Edilma Pinilla