Siguiendo las huellas de Jesús Buen Pastor

Somos Marisol Rodríguez y Yaneth Malagón, jóvenes que actualmente nos encontramos en proceso de discernimiento vocacional, descubriendo diariamente la voluntad del Señor.

Hemos tenido la oportunidad de participar en el retiro de discernimiento, organizado por las vocacionistas de las Hermanas Pastorcitas.

Fue una experiencia fuerte, intensa, y sobretodo muy agradable; se logró que cada una de nosotras reflexionáramos acerca de nuestra propia vida, poniendo énfasis en la parte humana y cristiana.

Junto con las animadoras vocacionales: Hna. Cleofilde Hernández Q. y Hna. Carmen Cecilia Rozo L., luego del retiro, partimos para la experiencia de misión del 14 al 26 de diciembre de 2008,  que se llevó a cabo en el corregimiento el Salto de Bordones -  municipio de Isnos - Huila.

En las visitas a las familias, pudimos darnos cuenta de la realidad que se vive en muchas de ellas, como la falta de los sacramentos, especialmente del matrimonio; en otras pudimos observar cómo las personas que están en el Proceso de la Nueva Evangelización, han tenido un cambio radical para sus vidas, consagrándose más a Dios y a favorecer la comunión con la comunidad; también han dejado a un lado los vicios y el trato en la familia es cada vez mejor, cultivando los valores humanos y cristianos.

Con los niños se realizó la novena de Navidad, momentos de relax como juegos y dinámicas, y con ellos se visitó a las familias más necesitadas materialmente del sector. Gracias a la metodología empleada, se logró que los niños participaran activamente y con alegría vivieran la Navidad.

Para nosotras fue una experiencia realmente satisfactoria, alimentada por el amor de Dios, llena de alegría sintiendo que Dios hablaba por medio de nosotras; además el hecho de entregarnos con gozo en la misión es muy significativo, puesto que Jesucristo también lo hacía. Gracias a esta experiencia aprendimos a valorar aún más todas las capacidades y habilidades que el Señor nos ha regalado para ponerlas al servicio de Él y de los demás, también de lo importante que es prepararnos adecuadamente para ejercer la misión pastoral.

Agradecemos a Dios por esta oportunidad y seguimos empeñadas en nuestro proceso de discernimiento para dar la respuesta que el Señor nos está pidiendo.

Marisol y Yaneth