Delegación Argentina-Bolivia
 

Retiro anual de los Amigos de Jesús Buen Pastor
 

Los días 18 y 19 de Agosto, bajo el lema "creciendo en nuestro corazón pastoral", nos congregamos como familia y amigos a vivir un tiempo dispuestos a encontrarnos con Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida.

El primer día por la mañana, compartimos con Hna. Adriana Galay (Superiora de la delegación  Arg-Bo) un momento de reflexión sobre la "cura Pastoral", llevándolo luego a un tiempo de oración personal, que nos disponía a escuchar y meditar "cómo debería ser nuestra acción pastoral hoy" y "dónde debe estar nuestro centro". Lo cual fue puesto en común durante un plenario que permitió el enriquecimiento mutuo.
   

Por la tarde, dos integrantes del instituto San Gabriel Arcángel (Gabrielinos), Sebastián Dugo (Novicio) y Omar Tarditti (aspirante) presentaron sus testimonios de vida, desafíos y misión, acercándonos así un mayor conocimiento sobre los institutos agregados de la Familia Paulina: su realidad hoy, y cuál fue el sueño de Alberione para ellos, haciendo así concreto el plan de Dios.

Por la noche, vimos la película de "San Pedro Apóstol". Ésta nos introdujo de modo especial en la celebración nocturna; donde rezamos y meditamos la oración del "Pacto" con Hna. María de los Ángeles Seijo - Consejera.
 
   

Compartimos un momento de adoración en común, y a ejemplo del Beato Alberione, tuvimos la gracia de vivir una noche de luz, en que, por turnos y de a dos, permanecíamos delante del Buen Pastor Eucaristía, en adoración.
 

 

Esta experiencia tan significativa para nosotros, concluyó por la mañana del día 19, con una celebración en comunidad, haciendo presentes a quienes pidieron oración y en comunión con quienes estuvieron acompañándonos espiritualmente.

Más tarde, junto a Hna. Adriana Galay, profundizamos sobre "la Pastoral como cura del rebaño".

Luego celebramos la misa "con alegría y sencillez" (Hch. 2, 46) renovando nuestra elección por Dios, como centro de nuestras vidas.
 

Por la tarde pusimos en común algunas conclusiones, confirmaciones, gracias y experiencias de lo vivido, en este tiempo intenso de oración. Concluimos la jornada con la oración que nacía del corazón de la comunidad, cantando el Aleluya.

Damos gracias a Dios por las bendiciones derramadas en este tiempo, por las Hermanas Pastorcitas y los Gabrielinos que nos estuvieron animando y acompañando, y por todos aquellos que nos tuvieron presentes en la oración.

   

Aún reconociendo que somos "débiles, ignorantes e incapaces en todo" se nos ha manifestado y enviado a anunciar a Jesucristo que es "el Camino, la Verdad y la Vida, la Resurrección y nuestro único y sumo Bien" ¡Qué hermoso tesoro hemos recibido... damos gracias a Dios! ¡Aleluya!

 Gabriela Cavallero

Amigos de Jesús Buen Pastor